Por el aire se esparcían
las notas de un acordeón,
al son bailaba María
muy arrimadita a Juanón.
Era un vals muy sensiblero,
con letras de puro amor,
donde se abandonan fueros
pues los derrite el calor.
Están solos…solos…ellos…
aunque están entre el gentío,
el momento es tan bello…
que el tu y yo…solo es un mío.
Sienten que el mundo se para
en ese largo momento,
donde se juntan las caras
y se funde el sentimiento.
Donde el abrazo es ternura
y la ternura es un Cielo,
la danza los lleva en vuelo,
vuelo de buena ventura.
La luna madrugadora
se pinta al atardecer,
invitando tentadora
a ese hombre y esa mujer
Un arco iris rodea
la platea del escenario,
el vaivén es relicario
que ingrávido ronronea.
Se desborda la pasión,
se entrechocan las cinturas,
y hay olas de calenturas…
que preparan la ocasión
Ya se dilatan las pieles,
los besos se vuelven poros,
los ojos cantan a coro…
se duermen en sus laureles.
Todo es puro, no hay pecado,
es la vida en manifiesto,
que al viento ya deja expuesto
lo que ese vals ha bordado.
Y la pareja se marcha,
buscando un colchón de flores,
la música deja escarcha…
que fundirán dos amores.
Tinuco
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