sábado, 6 de noviembre de 2010

PASADA LA MEDIA NOCHE

Son las dos de la mañana
y mi marido no viene.
¿Quien será la picarona
que a estas horas le entretiene?

Esta canción montañesa,
canto yo a la misma hora,
porque el sueño no me pesa,
ni me despierta la aurora.

Estoy como un ruiseñor,
delante de esta pantalla,
contando las mil batallas
que yo libré con furor.

La de la infancia, primero,
luego la de juventud,
la de hombre casadero
y ahora la de senectud.

Ni he ganado, ni he perdido,
a pesar de mis derrotas.
Lo que hice, no llegó a nota,
ni terminé suspendido.

Y en este mismo presente,
estoy en un duerme-vela,
si tener donde "metela"
a pesar de estar "caliente".

Pero soy "cura" de curia
y aguanto, pues más de un mes.
y entonces va la lujuria,
me concede hasta otros tres.

Y tres por cuatro son doce,
los meses que tiene el año.
Y al no existir ningún roce,
la "caña" queda sin caño.

Pero al ser yo muy tranquilo,
me conformo con lo que hice.
Y la he cosido con hilo
para no tener deslices.

Así me tomo la vida,
que me río de mi mismo,
sin hacer a nadie herida
sin emplear el cinismo.

Y ahora, espera...que algo pasa,
que están llamando al portón...
¡HOLA MOZA, ENTRA EN CASA
QUE ESTA NOCHE HAY "GRAN FUNCIÓN".

Perdonadme compañeros,
lo mismo las compañeras.
Lo primero es lo primero
y esto es algo que no espera.

Tinuco

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